Fumar. ¿Por qué fumamos? Se supone que porque nos gusta. Pero,
¿realmente fumar en sí nos gusta? Yo creo que la respuesta al fumar o no fumar
yace en el gusto y poca gente fuma por gusto.
Pero antes de empezar con gustos y aficiones hablemos de la salud.
Fumar es malo para la salud. Nadie puede refutarlo. Científicamente está
probado y no hay más que acudir a la razón para caer en que inhalar humo no es
muy saludable. La famosa frase de que cada cigarro acorta la vida un poco, es
verdad. Pero ya no solo eso sino todas las enfermedades que puede traer
consigo. En contestación a lo anterior, alguien puede decir que son
los únicos inconvenientes y que no son suficientes. Puede ser, depende de la
persona pero, ¿de verdad merece la pena arriesgar o atentar contra nuestra vida
solo por el mero hecho de fumar? En primer lugar, la vida de uno mismo me
parece razón suficiente y en segundo lugar, no creo que le guste a mucha gente.
He aquí el problema del tabaco. La adicción. Hace que
parezca que nos gusta pero no, en el fondo solo lo hacemos porque parece que lo
necesitamos. Para mí, este es el mayor problema del tabaco. Se empieza usando
el tabaco para parecer más mayor o más malo y se acaba siendo usado por él, razón más que suficiente por la que no debemos fumar. Los placeres de la vida están
bien si los usamos nosotros.
Para finalizar y en conclusión, resaltar la palabra “adicción”
y tenerla en mente porque será clave si decidimos fumar. Pensar lo que conlleva
dar la primera calada. Y si ya has tomado la decisión, pensar si está
mereciendo la pena y si nos gusta de verdad o solo es por la sociedad por lo
que lo hacemos.
Pedro Montero de Espinosa Moya 4ºB ESO
Enuncia el tema salud antes, de lo contrario el segundo párrafo no resultaría coherente.
ResponderEliminar